Contra el viento del norte

Contra el Viento del Norte

Daniel Glattauer

Sinopsis:

En la vida diaria ¿hay lugar más seguro para los deseos secretos que el mundo virtual? Leo Leike recibe mensajes por error de una desconocida llamada Emmi. Como es educado, le contesta y como él la atrae, ella escribe de nuevo… Así, poco a poco, se entabla un diálogo en el que no hay marcha atrás. Parece solo una cuestión de tiempo que se conozcan en persona, pero la idea los altera tan profundamente que prefieren posponer el encuentro. Además, Emmi está felizmente casada y Leo aún está saliendo de una relación fallida. Y, en cualquier caso ¿sobrevivirían las emociones enviadas, recibidas y guardadas un encuentro «real»? Y en ese caso, ¿qué hacer?

Un libro que, una vez abierto, no puedes volver a cerrar. Una trama audaz y brillante, llena de inteligencia, humor y ternura.
Unos protagonistas inolvidables que empatizan inmediatamente con el lector.

Sobre el autor:

Foto extraída de http://hechoeneuropa.wordpress.com/2010/12/08/un-hombre-y-una-mujer-conectados-por-la-red/

Escritor y periodista austriaco, Daniel Glattauer ha trabajado para medios como el diario Der Standard, donde tiene una columna de opinión.

Ha publicado varios libros, siendo su obra de 2004 Der Weihnachtshund adaptada al cine. En 2006 logró el German Bok Prize por Contra el viento del norte, obra que ha supuesto su salto al mercado internacional y que ha sido traducido a más de 25 idiomas.

Sobre el libro:

Emmi es una chica temperamental entre treinta y cuarenta años, no lo sabremos bien hasta casi finalizar el libro, casada, con dos hijastros, con una vida feliz. En ningún momento sabremos qué físico tiene, solo que es guapa.

De Leo tampoco sabremos absolutamente nada en lo que a físico y edad se refiere. 

Debido a un error a la hora de escribir un correo chocan en el ciberespecaio y tras un nuevo error, empiezan a entablar una ligera correspondencia, que poco a poco se irá haciendo más profunda hasta convertise en amistad, ambos se irán enganchando el uno al otro hasta tal punto de rozar la locura. Apenas saben el uno del otro, tienen una vida, pero no pueden vivirla si no ven en su bandeja de entrada un email del otro.

Los sentimientos se revelan, pero el recelo permanece. El miedo a la reacción, al qué pasará, al nos gustaremos o no, a que todo se haga más serio jugará un papel importante en cada página.

Mi opinión personal:

Con este libro pasa como con el príncipe azul, llevas años viéndolo de lejos, te enamoras perdidamente de él (de sus reseñas en este caso, de su imagen, de sus sinopsis) pero por una razón u otra nunca llegas a hacerte con él y cuando por fin, como una cita inesperada, cae en tus manos y abres su primera página.... tu mundo se desmorona, no es lo que esperabas, pero estás tan "enamorada" que ya no puedes despegarte de él.

Así es como puedo definir mi relación con Contra el Viento del Norte, no sé cuántos años llevaba viéndolo por la red, leyendo opiniones que lo ponían por las nubes, como la novela del año, y por fin hace poco pasó a formar parte de mi librería.

Hoy me pareció un buen día para leerlo y en cuanto abrí la primera página ya no pude parar de leer, es cierto, fue imposible y la verdad es que se lee rapidísimo, en unas tres o cuatro horas ya está terminado.

¿Qué puedo decir de él? Pues para empezar, yo no creo que a este libro se le pueda precisamente llamar novela. No hay una redacción que así lo demuestre, una descripción, no puedes imaginarte el paisaje, ni a sus personajes... bueno sí puedes, pero el libro no te ayuda en nada. Es tan solo un sin fin de correos electrónicos en el que una relación va creciendo. Solo sabemos lo que sus protagonistas nos cuentan, nada más allá.

He de decir que es una forma muy original de escribir un libro, a veces un poco desbordante. Hubo momentos en los que pensé que iba a volverme completamente loca con tanto email. Además el tira y afloja que se traen en todo momento es bestial y te dan ganas de estamparte la cabeza una y otra vez con la pared para dejar de sufrir, pero sin embargo, no puedes parar de leer, es imposible.

Me he sentido como una voyeur, como un hacker que entra en un correo electrónico privado y no puede evitar husmear y leer todos y cada uno de los correos electrónicos. 

No me esperaba el final, la verdad, pero sé que no es un final, ya que existe una segunda parte llamada Cada Siete Olas... perdonad mi masoquismo, pero creo que hoy mismo me sumerjo en su lectura. Sé que carece de calidad literaria, que no es una novela como la quieren pintar, que es casi desquiciante, pero el autor ha conseguido lo que quería... enganchar y entrener... porque para qué negarlo, la novela es entretenida un rato, tiene algunas cosas poco creíbles y otras que sí.

Y os voy a confesar una cosa, algo privado... quizás no debería, soy casi una escritora famosa jejejeje... bueno en fin, que ya estoy muy mayor, y si uno vive las cosas es para compartirlas. Con diecisiete años conocí así por casualidad a alguien, por correo electrónico. Nuestra "relación" duró muchísimo tiempo, un año, luego se paró, luego la retomamos, luego se paró... y así estuvimos algunos años. La relación fue super traumática, él tenía su vida y yo pues estaba empezando a vivir,  y lo nuestro no lo sabíamos definir, las palabras que más úsabamos era "enganchado a ti". Nuestros miedos eran exactamente los mismos que los que expresan estos personajes. Incluso alguna vez fanteaseamos con vernos en algún hotel a oscuras, para poder conocer nuestra piel antes que nuestros rostros.... jejejeje, qué cursi, pero sí fue así. Vivíamos bastante lejos uno del otro, y nunca dimos el paso definitivo para encontrarnos y sinceramente creo que se hubiera roto la magia. Además en el libro me tocó un poco la fibra el tema de la voz, porque yo tuve la misma sensación con mi hombre-virtual.

Joer, a lo mejor tenía una gran novela en correos electrónicos y nunca se me ocurrió que uniéndolos todos podía tener un libro :)

En fin, llevo un par de horas dándole vueltas a qué puntuación ponerle, y no estoy muy segura, pero dado que me voy a lanzar de cabeza a su sengunda parte, está claro que en el fondo me gustó, ya fuera por el enganche o por la similitud de una experiencia propia en mis años mozos jejeje (joer que solo tengo 30 eeeeh, nos os vayáis a pensar...). En fin, que no me decido, así que me quedo en terreno neutral, ni una puntuación muy buena ni una muy mala: